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Necesario que Poder Legislativo conozca a fondo avances científicos de terapia con células CAR-T: Rosales Cruz
Ciudad de México, 22 de noviembre de 2025
Realizan en la Cámara de Diputados el “Simposio especializado Células CAR-T”
La diputada María Magdalena Rosales Cruz (Morena) señaló la necesidad de que el Poder Legislativo conozca a fondo los avances científicos de la terapia con células CAR-T, para impulsar acciones al respecto.
Al inaugurar el “Simposio especializado Células CAR-T”, que se realizó en la Cámara de Diputados, la legisladora destacó que “algunos hemos oído, escuchado, que es un avance científico tan importante, pero que conocemos solamente una parte. Y esto nos limita también a los legisladores para poder ver de qué manera podemos apoyar al área médica y también al área de investigación”.
Agregó que la articulación entre ciencia y política pública debe fortalecerse, pues “todos necesitamos de todos para avanzar por el bien de la humanidad”.
La diputada agradeció la labor de los especialistas convocados, investigadores “que están en sus laboratorios, poco los conocemos, pero que ahora tenemos el gusto de presentarlos en este simposio”.
En su participación, la bioquímica Eva Salinas Miralles expuso que la Sociedad Mexicana de Inmunología desde hace casi cinco décadas trabaja para “hacer avanzar el conocimiento científico desde México y ponerlo al servicio de la salud de todas y todos en nuestro país”.
Añadió que la velocidad de la innovación obliga a generar espacios de encuentro entre quienes producen conocimiento y quienes legislan, pues “el desarrollo de terapias inmunológicas para prevenir, tratar o curar enfermedades ha avanzado de una manera tan vertiginosa que es sumamente importante generar estos espacios académicos”.
La especialista enfatizó que la colaboración entre ciencia y Congreso es indispensable: “Creemos profundamente que cuando científicos y legisladores se escuchan, se entienden y colaboran, nacen oportunidades reales para transformar la salud y la vida de las y los mexicanos”.
El doctor José Carlos Crispín, al explicar los fundamentos de la inmunoterapia con células CAR-T, detalló que el sistema inmunológico es capaz de identificar y destruir células infectadas o enfermas. Las células T distinguen entre células sanas y dañadas, ya que “cuando detectan una célula que está enferma, entonces la pueden matar”.
Añadió que este mecanismo se basa en la capacidad de las células T de reconocer moléculas específicas: “lo que está reconociendo son fragmentos del virus que se expresan en la membrana, en la superficie de la célula infectada”; asimismo, tiene esta misma capacidad contra células maligna.
Por ejemplo, dijo, el sistema inmune puede destruir tumores “siempre y cuando puedan verlas, puedan distinguirlas de las células sanas”. Sin embargo, esto no siempre ocurre debido a que “uno de los principales obstáculos que tiene el sistema inmune para destruir el cáncer es que a veces no lo puede ver y no tiene la capacidad para darse cuenta que una célula es maligna”.
El especialista presentó la base de la terapia CAR-T, la describió como “un tipo de terapia celular avanzada” en la que se realiza “una edición genética en la célula T que le va a permitir identificar a una célula tumoral”.
Detalló que el receptor artificial es “un Frankenstein molecular en donde se han tomado fragmentos de otras moléculas para armarlo y generar un receptor que no existe en la naturaleza, que tiene en la parte de afuera […] un dominio que es capaz de unirse a la célula maligna”.
El proceso permite que “la célula T se dirija en contra de la célula cancerosa y es capaz de eliminarla […] que han sido manipuladas genéticamente para expresar un receptor artificial que les confiere la capacidad de reconocer y eliminar las células cancerosas”.
La doctora Roberta Demichellis Gómez habló sobre la leucemia en México, ya que el país enfrenta la enfermedad de forma más frecuente y letal que en otras regiones, “sobre todo se mueren muchos pacientes con leucemia linfoblástica aguda”, y los datos muestran una brecha crítica en los desenlaces respecto a Estados Unidos o Europa.
Añadió que la enfermedad es una de las principales causas de muerte en población infantil y adulta joven, quienes padecen “leucemias más agresivas” y no existe “un acceso a terapias novedosas y también más mortalidad relacionada al tratamiento”.
Destacó que la falta de acceso a CAR-T representa una pérdida directa de vidas, pues “vemos todos los días pacientes que podrían vivir y no lo están por no tener acceso a este tipo de tratamientos”.
La especialista explicó que, a pesar del alto costo de las terapias comerciales, los estudios internacionales muestran que CAR-T es costo-efectivo debido a los años de vida ganados y a la calidad de vida recuperada.
Al hacer uso de la voz, el doctor Andrés Gómez de León expuso los modelos de producción de CAR-T en el extranjero y las ventajas de manufacturarlas localmente. Se fabrican en centros industriales que tardan semanas y generan precios inaccesibles, pues “te regresan una bolsa y te la venden de regreso casi por 10 millones de pesos”.
Indicó que este modelo “ha fracasado para ofrecer las terapias a los pacientes de todo el mundo”. Mostró alternativas descentralizadas mediante bioreactores automatizados que permiten producir CAR-T en hospitales.
“Es un hornito […] tú pones las células, pones el virus y a las dos semanas pita y ya tienes tu CAR-T”. Estos modelos han permitido que países como España, Brasil, India, Canadá y Uruguay traten pacientes a costos entre 30 mil y 90 mil dólares, con resultados clínicos comparables a los productos comerciales.
Hizo énfasis en que México cuenta con capacidad clínica y científica suficiente, pero falta una estructura regulatoria que permita comenzar a tratarlos: “los pacientes de ahorita […] se nos van a morir miles en lo que construimos una fábrica mexicana de CAR-T”.