Intervención de Carolina Viggiano Austria, durante la reunión de Comisiones Unidas, de Puntos Constitucionales, y de Estudios Legislativos

Ciudad de México, 23 de octubre de 2024

Gracias, presidente. Yo creo que es imposible abordar este tema sin tener un poco de contexto de por qué estamos aquí hoy, por qué llegamos hasta este punto. He escuchado durante todo este tiempo, argumentos para justificar todo lo que han hecho desde el principio y no puedo dejar de mencionar cómo inició todo para que tuvieran la mayoría en la Cámara de Diputados, con una sobre representación que, aunque no les guste, tuvieron el 74 por ciento, de las comunes, teniendo 54 por ciento de los votos.

Esa es una realidad aquí en el Senado, llevándose de una manera incorrecta, no ética, a dos compañeros senadores a su bancada. Esa es la realidad, eso es lo que presumen como una mayoría que tiene. Por otro lado, también he escuchado que dicen que es el mandato del pueblo. Esta es una democracia, no es un régimen totalitario, es una democracia.

Y si bien es cierto, también he escuchado que no tiene derecho a interponer de amparo, efectivamente en leyes generales, efectivamente incluso en reformas constitucionales, pero sí por cuanto hace el proceso legislativo. ¿Y el proceso legislativo, como se ha señalado aquí, estuvo lleno de vicios, estuvo evidentemente, pues, lleno de signos autoritarios y yo, he escuchado aquí desde que llegamos, nuevamente ese ánimo autoritario de por qué lo dejas hablar un minuto?

Porque me parece que no nos pueden regatear. Nosotros tenemos muy claro que somos minoría, tenemos muy claro que no tenemos los números para ganarles, pero eso no nos va a llevar a renunciar a defender nuestras convicciones y a representar a quienes representamos.

Eso no lo vamos a hacer, ni es ético, ni es correcto. Yo, por el contrario, quiero invitarlos a que cuando voten, cuando decidan cosas, piensen en sus hijos, en sus nietos, piensen también en muchas generaciones que hoy tenemos. No pueden estar haciendo reformas para la ocasión, como se dijo aquí, tienen que ser reformas con visión de estado.

Y voy a entrar un poco, miren, también se ha dicho, es que aquí ha habido cosas que han hecho incorrectamente. ¿Cómo va a estar un poder sobre el otro?, ninguno sobre el otro. Somos un equilibrio de poderes. ¿Y por qué se hizo el juicio de amparo y acciones de inconstitucionalidad y todos estos instrumentos?, para combatir el abuso del poder, para ponerle límites al poder.

La historia en el mundo nos ha mostrado que siempre hay, cuando hay concentración de poder, hay abusos, hay esa tentación, y siempre terminan las cosas mal. No hay una sola historia del mundo que muestre que eso termina bien, ninguna. Entonces, miren, voy a señalar cifras sobre acciones de continuidad en la última década, en 2013 se promovieron 43 acciones, 115 controversias, en 2014,113 se promovieron 121, en 2015, 125 acciones de constitucionalidad, 84.

Me voy a brincar a ir a señalar una suma que suma todo esto. En el sexenio de Peña Nieto, se promovieron, 680 acciones de inconstitucionalidad y 1127 controversias constitucionales. Y en cinco años del gobierno del presidente López Obrador fueron 1061 acciones de inconstitucionalidad y 1777 controversias constitucionales.

Sin duda ha pasado algo que no nos gusta, se ha judicializado la política, pero a su vez también se puede interpretar como que hay credibilidad en las instituciones para poder acceder a ellas y pedir que haya límites a esto. A mí me parece que, como se ha señalado aquí, la reforma más importante de la época reciente ha sido la del 2011.

El artículo primero constitucional cambió todo completamente, le dio otra visión a la acción de gobierno en todos los niveles, en todos los poderes públicos, eso es lo más importante. Y se hizo con la participación de todos y especialmente de la sociedad civil, a quien hay que reconocerle que siempre ha estado ahí.

Nosotros nos hemos ido, pero ellos siguen ahí. Y hoy han hecho que ustedes corrijan ese artículo primero constitucional, que era una aberración completamente. Me dio vergüenza escuchar ayer en la tribuna a una persona que yo respeto leyendo eso, esa es la verdad. Para terminar, quiero decirles una cosa, aquí he escuchado también otro tipo de cosas y por maestros de derecho, que me da también pesar escucharlos.

No confundamos, no confundamos el poder constituyente con el poder constituido, no lo confundamos. Pero además de eso, hay cláusulas pétreas y aquí se están violentando. Una de ellas, la más importante tal vez en toda esta discusión, es la división de poderes, el principio de legalidad, eso me parece fundamental.

Los poderes del estado son poderes constituidos, pero no puede rebasar el diseño que hemos asumido por el poder constituyente. No confundamos. Si ustedes hubieran hecho una consulta específica para esto con la población, sería otra cosa. Y por último les diría, miren, hacer gobierno, dar buenos resultados, requiere de buenos perfiles, que estén preparados, que estén formados.

Por eso se han llevado muchos de lo que ustedes llaman PRIAN, porque les faltan cuadros, porque llegaron muy rápido al poder. Pero miren, les voy a decir una cosa, ahorita mismo se están deshaciendo de la mitad de los jueces, termino de la mitad de los jueces y el 27 de la otra mitad.

La curva de aprendizaje. Esta no es una reforma de justicia, es todo menos eso. Gracias, presidente. Muchas gracias.

Texto: Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Senadores | Foto: Cámara de Senadores