Durante una audiencia que tuvo lugar el pasado lunes, la presunta víctima del actor se abstuvo de declarar para no incriminarse
Este
miércoles, autoridades retiraron los cargos en contra del actor Kevin Spacey,
acusado de agresión sexual en Massachusetts, en un caso que había sido debilitado
por la propia víctima.
Este
resultado era esperado después de la audiencia del 8 de julio, durante la cual
el joven que presuntamente había sido agredido por el actor en julio de 2016
decidió guardar silencio para no incriminarse.
La
inculpación por atentado al pudor y agresión contra el protagonista de “House
of Cards” ocurrió a fines de 2018, luego del surgimiento de varias otras
acusaciones de agresión sexual de jovencitos tras las huellas del movimiento
#MeToo.
De
acuerdo con la agencia AFP, el celular de la presunta víctima es clave: el
joven lo utilizó para grabar la supuesta agresión, y para comentarla en
mensajes de texto con su entonces novia y con un grupo de amigos.
Pero
el teléfono, que la defensa quería examinar, desapareció, confirmaron el lunes
el joven y sus padres, a pesar de que un policía dijo haberlo entregado a la
familia tras haber extraído todos los datos, pero admitió que no pidió un
recibo.
Sin
embargo, la familia del joven dice que nunca lo recuperó. Consultado largamente
sobre qué hizo con el teléfono y los mensajes, el joven asegura que no borró
nada.
Pero
cuando se le advirtió que cualquier manipulación del teléfono podía significar
una demanda en su contra, invocó la Quinta Enmienda de la Constitución de los
Estados Unidos, que permite a un testigo guardar silencio para no incriminarse
a sí mismo.
Texto
y Foto: AFP