Mejoredu publica su boletín Educación en movimiento número 37

Ciudad de México, 6 de febrero de 2025

Sus contenidos están dedicados al tema “La escuela: un recurso contra las adicciones”.

Puede consultarse en:

https://www.mejoredu.gob.mx/publicaciones/boletin/escuela-un-recurso-contra-las-adicciones

Gabriela Naranjo Flores —titular de la Unidad de Apoyo y Seguimiento a la Mejora Continua e Innovación Educativa de esta institución— destaca que las escuelas pueden ser entornos donde niñas, niños, adolescentes y jóvenes (NNAJ) se sientan seguros física y emocionalmente, se cuide su dignidad, el respeto, el diálogo, y el reconocimiento de todas y todos.

Con el título “La escuela: un recurso contra las adicciones”,  la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) publicó en su página web el boletín electrónico Educación en movimiento número 37, medio a través del cual este organismo contribuye a la reflexión y al aporte de elementos para seguir pensando cómo, en el marco de los planteamientos curriculares de la Nueva Escuela Mexicana, particularmente desde los ejes articuladores y el desarrollo de proyectos integradores y de lo que las comunidades escolares ya saben hacer, se puede abordar el fenómeno de las adicciones.

En el editorial, Gabriela Naranjo Flores considera que las escuelas pueden constituirse —“de hecho, muchas ya lo son”— en entornos donde NNAJ se sientan seguros, física y emocionalmente, se cuide su dignidad, prive el respeto, el diálogo, el reconocimiento de todas y todos. Afirma que es en comunidad como cada persona puede desarrollar plenamente sus capacidades y su pensamiento crítico, construir su identidad y su sentido de pertenencia, aprender y comprometerse, de tal manera que no se sea presa fácil de sustancias adictivas.

En este número, Francisco Miranda López —titular de la Unidad de Evaluación Diagnóstica de Mejoredu— da a conocer que el sector educativo enfrenta un desafío creciente ante el aumento del consumo de sustancias psicoactivas entre adolescentes y jóvenes. Asimismo, señala que este fenómeno impacta negativamente el aprendizaje y el bienestar integral de las y los estudiantes, creando barreras significativas para alcanzar los objetivos educativos y fomentar su desarrollo personal, e informa que Mejoredu publicó en 2024 el Estudio sobre experiencias escolares relevantes de prevención y atención de adicciones en educación secundaria y media superior.

En la sección Detrás de los números se destaca que desde los años setenta se monitorea en México el uso de sustancias adictivas por parte de NNAJ, a través de estudios y encuestas, los cuales se orientan a identificar tendencias y patrones de uso de tabaco, alcohol y otras sustancias adictivas, con objeto de reunir información que sustente estrategias de atención a los consumidores, sus familias y la sociedad en general.

En el artículo Una vida libre de adicciones: aportes desde la Nueva Escuela Mexicana, Jennifer Meza Miranda, Irving Carranza Peralta y Magnolia Bolom Pérez —del área Apoyo y Seguimiento a la Mejora Continua e Innovación Educativa de esta Comisión— analizan algunas de las acciones desarrolladas en el Sistema Educativo Nacional en torno a la prevención de adicciones en NNAJ, incluyendo los aportes de la Nueva Escuela Mexicana.

En No estamos solos, Rosa Mónica García Durán comparte con la comunidad escolar un proyecto cuyo objetivo consiste en que las y los estudiantes construyan espacios de confianza, a fin de que expresen sus dudas sobre las adicciones. En él se destaca el papel que juegan la familia y el apoyo social en la comunidad para enfrentar las dificultades que éstas conllevan.

Finalmente, el equipo de la Unidad de Vinculación e Integralidad del Aprendizaje de este organismo comparte Las juventudes y sus problemas: hacia una perspectiva social y participativa, artículo que expone cómo a partir de las experiencias que han funcionado en planteles de educación media superior y de los aportes de la investigación educativa, Mejoredu planteó la necesidad de asumir una perspectiva social y participativa de las y los jóvenes estudiantes, desde un enfoque de derechos, que les reconozca como constructores de su propia formación y bienestar; tome en cuenta que las juventudes son heterogéneas, múltiples y diversas, y que sus contextos median la forma en que experimentan y transitan los cambios, los desafíos y las situaciones que les presenta su realidad; y que tienen capacidad de agencia para reflexionar, analizar y proponer alternativas de solución con la mediación de las personas adultas, al ser protagonistas de sus trayectorias de vida, incluida su experiencia educativa.

Texto e Imagen: Mejoredu