El portal de noticias donde los políticos se miden y son medidos.
La violencia política en América Latina, desafío para la consolidación democrática, afirma Monreal Ávila
La violencia política en América Latina representa un desafío para la consolidación democrática, pues a pesar de los avances legislativos y los esfuerzos por fortalecer la protección de candidatas y candidatos e impedir las agresiones en general, persisten retos significativos, afirmó el diputado Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados.
Mensaje del senador Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, en el marco el Día Internacional de las Mujeres, “Urna conmemorativa”, en memoria a la participación política de las mujeres en México
Ciudad de México, 7 de marzo de 2025
Buenos días a todas las personas.
Agradezco la invitación a la consejera Claudia Zavala, organizadora central de evento.
Por supuesto a mi compañera y amiga Guadalupe Taddei, presidenta del Consejo General del INE.
A mi compañera y amiga, Rosa Icela Rodríguez.
Lo digo de corazón, eh, porque se usan esas fórmulas, son gente que yo estimo y aprecio mucho.
A mi compañero Sergio Gutiérrez Luna.
No menciono a todas, a todos, perdón.
A la consejera Carla Humphrey, a todas, a todos.
Estamos allí tres compañeros, cuota de género, porque el crecimiento de la participación política de las mujeres es afortunadamente muy fuerte.
Y, como aquí se ha dicho, es un largo trajinar.
El 8 de marzo, el Día Internacional de la Mujer no es una conmemoración, es una jornada de lucha, porque falta mucho por hacer todavía.
En materia política se ha avanzado, político partidaria, político electoral, político de representación, se ha avanzado de manera muy importante con la paridad, por poner un ejemplo.
Pero a final del siglo XIX, en Estados Unidos en la ley pusieron que las personas podían votar, no recuerdo qué estado, quizá fue Pensilvania, pero no me lo den por bueno, y llegaron las mujeres a votar.
Y los hombres dijeron: “¿Y ustedes qué hacen aquí?”, “Pues venimos a votar”, “Pero, ¿quién las convocó?”, “Allí dice que las personas pueden votar, nosotras somos personas”.
Quitaron de la ley el término “personas”, para quitarle el derecho al voto a las mujeres.
Fue hasta principios del siglo XX.
Aquí en México hasta 1953, mi abuela, que siempre la recuerdo, María de la Luz Velázquez Villalobos, tenía 40 años cuando por primera vez pudo votar, y seguramente ni siquiera fue a votar, agobiada por todas las tareas que tenía que sacar adelante.
Elvia Carrillo Puerto, que sí se le ha recuperado pero no con la suficiente fuerza, por ser una mujer de izquierda, fue diputada local, ganó una elección como diputada federal y no le permitieron asumir el cargo porque era mujer.
Es impresionantemente duro lo que las mujeres han tenido que luchar para lograr condiciones de respeto a su dignidad como seres humanos, condiciones de igualdad, condiciones de oportunidad.
Recién entraron las mujeres a la Constitución y no hay ninguna duda que en el ámbito social falta mucho por hacer.
Nosotros tenemos que erradicar toda violencia en contra de las mujeres, todo clasismo, todo racismo, toda misoginia, toda homofobia, pero particularmente la violencia contra las mujeres que en pleno siglo XXI siguen siendo acosadas, discriminadas, violentadas, agredidas sexualmente, violadas sexualmente, asesinadas sólo por el hecho de ser mujeres, es inconcebible que estas cosas sigan sucediendo.
Y aquí en México por primera vez en 200 años, una mujer, desde República Federal llega a la Presidencia de la República y no cualquier mujer.
La verdad es que acabamos de ver una vez más la estatura de estadista, el tamaño, la capacidad, la entrega de nuestra compañera presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que ha tenido nada menos que enfrentar al prototipo, digámoslo suave, del patriarcado con el presidente Trump en Estados Unidos y ha logrado sacar adelante nuevamente un acuerdo benéfico para nuestra patria y para nuestro pueblo.
¡Larga vida a la compañera presidenta Claudia Sheinbaum Pardo! que demuestra justo la capacidad de un ser humano, la capacidad de un ser humano, pero que es menospreciada por ser mujer.
Todavía hay quien dice que detrás de ella está gobernando un hombre cuando ha acreditado con creces en estos meses su capacidad.
Y tenemos que llegar también a las mujeres, a las más humildes, a las más pobres, a las más discriminadas, a las que más dificultades enfrentan día a día porque se les cierran todos los caminos.
Quiero, para cerrar compartirles una frase que no es mía… “Sin alguien haciendo las tareas de cuidados, la clase obrera no habría podido hacer trabajo político, no hay lucha política posible”.
Nosotros hoy estamos aquí porque alguien sostuvo nuestra vida y esa persona que sostuvo nuestra vida fue siempre una mujer, fue siempre una madre, fue siempre una abuela, fue siempre una hermana, fue siempre una compañera, ha sido siempre una mujer.
No hay trabajo político ni hay trabajo humano posible sin el enorme sustento de las mujeres.
Lo digo sin ninguna retórica y sin ninguna demagogia.
Y esas condiciones, por cierto, deben modificarse también.
Ese reconocimiento del enorme esfuerzo y sacrificio que las mujeres hacen debe ser también un reconocimiento de la tarea de liberación que entre todos los seres humanos tenemos que construir para que termine toda discriminación en contra de las mujeres.
Así es que sirva esta urna conmemorativa como un recuerdo vivo de lo mucho que tenemos por hacer, del compromiso que tenemos que reforzar.
Y cierto, yo sueño con que México sea un país de electores y electoras “empedernidos del mundo”, pero también sueño, y trabajaremos muy duro para que eso se haga realidad, de que México sea un país donde no exista ningún tipo de violencia contra las mujeres y contra ningún ser humano, pero particularmente contra las mujeres que han vivido tantos siglos, no décadas, siglos de discriminación, de abuso y de atropello.
¡Larga vida a las mujeres mexicanas y larga vida a las mujeres del mundo!
Muchas gracias por su atención, compañeras y compañeros.
Texto: Cámara de Senadores | Foto: @fernandeznorona