Mujeres tienen todo el talento para ser líderes de su propio destino, afirma Clara Brugada al presentar programa de Autonomía Económica

Ciudad de México, 7 de noviembre de 2025

El nuevo Programa de Autonomía Económica de las Mujeres busca fortalecer la independencia financiera de las capitalinas mediante apoyos directos, créditos accesibles y empleos con igualdad y dignidad

Incluye tres componentes claves: capital semilla de 25 mil pesos no reembolsables, microcréditos de hasta 100 mil pesos con tasas de interés de 0 a 3 por ciento, y la vinculación laboral con empresas sororas comprometidas con la equidad

El Gobierno de la Ciudad de México invertirá 500 millones de pesos entre 2025 y 2026, con el acompañamiento de 70 monitoras especializadas

La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, presentó el Programa de Autonomía Económica de las Mujeres, una estrategia integral para fortalecer la independencia financiera de las capitalinas, romper los ciclos de desigualdad y abrir oportunidades reales para el emprendimiento, el empleo y la generación de ingresos.

Durante su mensaje, Brugada Molina destacó que este nuevo programa social nace de una convicción profunda: “El acompañamiento a las mujeres debe traducirse en oportunidades reales, en ingresos propios, en redes de apoyo y en condiciones para una vida libre y con dignidad.”

Subrayó que la verdadera igualdad entre hombres y mujeres sólo puede alcanzarse si se derriban las barreras económicas que históricamente han limitado su desarrollo.

“Queremos que las mujeres pasen de los comercios de supervivencia a convertirse en empresarias y líderes de su propio destino. Este gobierno confía en las mujeres y sabe que tienen todo el talento y la capacidad para construir su autonomía económica”, afirmó.

La mandataria capitalina señaló que en la Ciudad de México 42 por ciento de los hogares están encabezados por mujeres, y que 37 por ciento de ellas, es decir, 1.8 millones, viven en pobreza de ingresos, lo que demuestra la urgencia de impulsar políticas públicas que fortalezcan su capacidad productiva y su acceso a financiamiento.

“Muchas veces el sistema bancario no les presta porque no tienen aval, historial o comprobante de ingresos. Pero este gobierno sí cree en las mujeres, sí confía en ellas”, expresó.

El Programa de Autonomía Económica de las Mujeres cuenta con tres componentes principales: Capital semilla, Microcréditos y empleo en Empresas sororas, todos diseñados para brindar apoyo integral desde la formación hasta la consolidación de proyectos productivos.

El capital semilla consiste en un apoyo de 25 mil pesos no reembolsables, entregados en dos ministraciones, a través de Fondeso, para mujeres que inician un emprendimiento, un pequeño negocio o un proyecto de autoempleo verificable.

“No se trata de regalar dinero, sino de fortalecer proyectos con futuro, de sembrar confianza para que florezca la economía de las mujeres”, enfatizó la Jefa de Gobierno.

En la vertiente de Microcréditos, el programa contempla montos que van desde 10 mil hasta 100 mil pesos, con tasas de interés de 0 a 3 por ciento y plazos de pago de hasta 36 meses, también canalizados mediante Fondeso. Este esquema permitirá que las mujeres con negocios en operación puedan acceder a recursos que impulsen su rentabilidad, formalización y crecimiento.

El tercer eje, denominado Empresas sororas, promoverá la inserción laboral de mujeres que han enfrentado obstáculos para incorporarse al mercado de trabajo formal debido a responsabilidades de cuidado, condiciones de vulnerabilidad o falta de oportunidades.

En esta vertiente, la Ciudad de México cuenta con el respaldo de cámaras empresariales como Canaco, Coparmex, Canacope, CMIC, Canadevi, AMMJE, G100, la Cámara Británica de Comercio y el Consejo Coordinador Empresarial, que se han comprometido a generar empleos con igualdad y dignidad.

Además, todas las beneficiarias formarán parte de la Red de Autonomía Económica, integrada por 70 monitoras capacitadas en acompañamiento técnico, financiero y feminista, quienes brindarán seguimiento continuo a cada proyecto. En colaboración con la Sedeco, la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo, la academia y organizaciones civiles, se impulsará la formación de las mujeres en sectores estratégicos y no feminizados, como tecnología, inteligencia artificial y desarrollo digital, con el propósito de ampliar su participación en áreas de mayor crecimiento.

Brugada destacó que una mujer autónoma económicamente “no sólo transforma su vida, sino también su entorno y el tejido social de toda la ciudad”. En ese sentido, informó que el programa contará con una inversión de 500 millones de pesos durante 2025 y 2026, con el objetivo de consolidar una política de largo alcance que promueva igualdad, prosperidad y bienestar.

“Cuando decimos igualdad, debe traducirse en programas concretos; si no, todo queda en discurso. Por eso este programa no sólo apoya con recursos, sino que acompaña, forma y confía en las mujeres para construir una Ciudad de México más justa, solidaria y con las mismas oportunidades para todas”, concluyó.

Por su parte, la titular de la Secretaría de las Mujeres de la Ciudad de México, Daptnhe Cuevas Ortiz, comentó que el programa es muestra de cómo se deben entender los derechos de las mujeres, pues el objetivo es que todas las capitalinas cuenten con autonomía para hacer valer sus derechos y garantizar su bienestar.

En tanto, la coordinadora general del Programa de Autonomía Económica de las Mujeres, María Elena Esparza Guevara, aseguró que una mujer autónoma no sólo se transforma a sí misma y a su entorno inmediato, sino que construye una ciudad más justa, solidaria y sostenible.

La presidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa, Isabel Ortiz Rojas, afirmó que la Ciudad de México es el motor económico de todo el país, mismo que tiene como participantes importantes a mujeres emprendedoras, líderes y empresarias, destacando que el emprendimiento femenino ha ido en aumento y ha sido generador de un impacto social positivo.


Ciudad de México, 7 de noviembre de 2025

Mensaje de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, durante presentación del programa Autonomía Económica de las Mujeres

JEFA DE GOBIERNO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, CLARA BRUGADA MOLINA (CBM): Hola, amigas. El día de hoy estamos contentas, porque estamos dando a conocer un programa planeado durante todo este año, que tiene que ver con garantizar la autonomía económica de las mujeres, como condición para garantizar el primer paso para la liberación de las mujeres. Y en eso estoy segura de que todas coincidimos.

Hoy quiero saludar a nuestro presídium de mujeres; invitadas especiales, funcionarias públicas. Y quiero saludar en especial, a María Elena Esparza, como la responsable de este programa.

Quiero saludarte, María Elena. Decir que confiamos en ti como una mujer responsable, transformadora, comprometida, para lograr que en la Ciudad de México podamos contar con un potente programa que propicie el crecimiento de las mujeres en todos los ámbitos.

Así que un fuerte aplauso y un reconocimiento a María Elena Esparza.

Saludo a todas las representantes, aquí, a la licenciada Isabel Ortiz Rojas, presidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresas. Gracias por acompañarnos.

Saludamos a Ada Irma Cruz, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño; gracias, Ada Irma, y también saludamos a las representantes de Coparmex, de Canaco, de la Cámara de Comercio Británica.

También saludamos a todas las representantes; a la licenciada Zaira Lorena Zepeda Huerta. ¿Dónde está? Aquí, por supuesto.

Y a las secretarias; todas las secretarias aquí presentes. Secretarias, pónganse de pie.

Muchas gracias, muchas gracias.

Y quiero empezar diciendo que estamos en un encuentro de mujeres que tiene como objetivo la autonomía económica, y que tiene que ver con la problemática de las mujeres en general.

Así que quiero iniciar este evento, haciendo una declaración firme: en la Ciudad de México no se tolera la violencia, ningún tipo de violencia contra las mujeres, eso es lo primero. Ni en el espacio público ni en el ámbito privado, ni en la vida política constitucional.

Nuevamente, rechazamos con absoluta contundencia, los hechos de abuso sexual ocurridos recientemente, en contra de la Presidenta de México, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo.

La presidenta no está sola, y desde esta capital, le expresamos todo nuestro respaldo, nuestra solidaridad y nuestro respeto. Y también decimos con la misma fuerza, que ninguna mujer está sola en la Ciudad de México.

Aquí en la Ciudad de México, el abuso sexual ya es un delito en el Código Penal. Pero no obstante, retomamos la convocatoria hecha a nivel nacional, de construir un plan de la Ciudad de México, un plan integral contra el abuso sexual, que defina protocolos, comunicación inmediata, atención y judicialización de los hechos.

Y eso lo tendremos muy pronto, para recibir el 25 de noviembre, Día Internacional Contra la Violencia hacia la mujer, y parte de los 16 días de activismo para este tema.

Así que para nosotros, es básico partir el día de hoy, con esta declaración.

Y este programa de Autonomía Económica de las Mujeres, nace precisamente con esa convicción, de que este acompañamiento a las mujeres, debe traducirse en oportunidades reales; en ingresos propios; en redes de apoyo y también en condiciones para una vida libre de violencia.

Este programa tiene el objetivo de empoderar a las mujeres, para transformar su entorno, fortalecer su independencia y romper también, ciclos de violencia y de desigualdad.

Miren. Cuando hablamos de desigualdad, pues ahí hay brechas muy importantes que tenemos que atender.

En la Ciudad de México hay 42 por ciento, de acuerdo con el INEGI, 42 por ciento de los hogares son encabezados por mujeres; 42 por ciento y 37 por ciento de las mujeres, es decir, 1.8 millones de mujeres, sufre pobreza de ingresos. Es decir, ingresos insuficientes para asegurar bienestar para sus familias.

Y si a lo anterior le sumamos que el sistema bancario, muchas veces no permite que las mujeres tengan acceso a créditos, no porque les falte capacidad o compromiso, sino porque no tienen aval, no tienen cómo demostrar ingresos, no tienen un historial crediticio, entonces les decimos a las mujeres que están en esa circunstancias.

El Gobierno de la Ciudad de México sí cree en las mujeres, y el Gobierno de la Ciudad de México tiene confianza en las mujeres y por eso echamos a andar este gran programa, basado principalmente en la confianza en las mujeres, de que tienen todo el talento y la capacidad, para pasar de comercios de supervivencia a convertirse en empresarias y líderes de su propio destino. Ése es el objetivo que tenemos para con las mujeres.

También es importante ver que la participación económica de las mujeres, es de 57 por ciento, frente al 75 por ciento de los hombres. Es decir, que aunque tenemos una de las mayores tasas de participación laboral femenina a nivel nacional, la brecha de desigualdad sigue siendo enorme.

¿Y por qué? ¿Por qué hay tanta desigualdad a nivel económico, entre mujeres y hombres? Porque las mujeres tienen una gran barrera histórica, provocada por la división sexual del trabajo y que tienen que enfrentar lo que tradicionalmente le toca a las mujeres, que son los cuidados. Cuidados de todo, de todo y de todos. Y además, querer salir a generar ingresos.

Entonces, no es lo mismo cuando una mujer sale de casa a un empleo; no es lo mismo cuando una mujer quiere echar a andar una empresa, que cuando lo hace un hombre. Las mujeres, lamentablemente, lo primero que buscan es flexibilidad en el tiempo, que les permita atender a los hijos e hijas que tienen en casa, o que puedan atender la problemática de cuidados que tienen a su cargo.

Entonces, por supuesto que no hay condiciones iguales, para jugar un rol económico. No lo hay. Hay una gran carga y barrera histórica hacia las mujeres, que les impide tener el mismo nivel. Por eso, cuando una mujer sale adelante económicamente o políticamente o culturalmente, o a nivel académico, es extraordinaria. Debe ser extraordinaria, para ser visibilizada.

Entonces, hay un gran trabajo extra, tremendo, que no es tomado en cuenta y que es una gran barrera, que impide que las mujeres todas, puedan salir adelante. El 90 por ciento de quienes dedican más de 40 horas semanales al cuidado, a las tareas de cuidado, son mujeres. Y por supuesto, que si a esto le añadimos problemas de violencia o de encontrarse en una situación difícil, de riesgo, de violencia, peor aún.

Porque entonces, se tiene que enfrentar con situaciones de mucha desigualdad y de vida distinta. Para poder romper los problemas de violencia, lo primero es ser autónomas económicamente, para lograr tener la autonomía para decir: basta.

Y aquí se rompe la violencia hacia las mujeres, porque tengo la capacidad de salir adelante económicamente, con los hijos e hijas. Entonces, esa es la gran tarea que le encargo a María Elena Esparza. Le encargo convocar a las mujeres que quieran salir adelante económicamente.

Y no se trata de transferir cheques de apoyo. Se trata de acompañar desde el primer momento, para todo lo que implica hacer un negocio o una empresa,que es difícil. Y cuántas y cuántos casos de fracaso se tiene, cuando se inician los negocios.

Entonces, lo que queremos es un acompañamiento permanente, un acompañamiento integral; un acompañamiento que pase primero por valorar, por estudiar la situación en la que se vive y se tenga conciencia feminista de la problemática de las mujeres. Eso es lo primero.

Si una mujer asume entrar a una etapa de crecimiento en lo económico, primeramente tenemos que hablar de por qué las mujeres tienen esta gran desigualdad. Entonces, acompañamiento en formación a las mujeres, pero también acompañamiento en lo técnico, en las decisiones que tienen que tomar.

Y que no estén solas; saber que van a tener una red de apoyo que les permita dar pasos adelante y saber para qué les alcanza, y para qué no.

Entonces, eso es lo primero. Es vital y es necesario, que lo tengamos en esta gran Ciudad de México. Vamos a derribar esas barreras que impiden que las mujeres puedan tener autonomía económica.

Y por eso, queremos democratizar la economía. Y por eso, hacer accesible a las mujeres que más lo necesitan, este tipo de instrumentos y de insumos. Mujeres que puedan tener acceso a un Capital Semilla, que haga florecer sus ideas y su economía.

Mujeres que puedan tener acceso a los créditos, microcréditos, créditos, que le ayuden a fortalecer lo que tiene y mujeres que puedan estar sólidamente formadas, con voluntad y con conciencia de que no podemos dejar las cosas como están en esta sociedad y que nos unimos las mujeres para que en esta ciudad tengan todas las condiciones, para iniciar empresas, negocios y autonomía económica.

Así que, queremos que las mujeres pasen de ser cuidadoras, a ser jefas de sus empresas. Líderes de sus emprendimientos, ya no como auxiliares de cualquier proyecto, porque no tienen tiempo, sino la capacidad de organizarse para salir adelante.

Entonces, tenemos en este programa, como bien ya se expuso, tres ejes. El primero es el de Capital Semilla, no reembolsable.

¿Por qué Capital Semilla? Porque, ¿cómo podríamos apoyar a las mujeres, si lo primero que le ofrecemos es una deuda, para salir adelante? No. Por eso, primero tenemos, además de todo lo que hablamos, de una fuerza importante para salir adelante, tenemos que apoyarlas en su proyecto, con un capital que le dice: “adelante”, a las mujeres. Tienes el apoyo de este gobierno, tienes recursos económicos y la confianza de que se va a traducir en proyectos productivos y en generación de ingresos.

Ese es el Capital Semilla, y no es un dinero que se regala, y como muchos dicen, a fondo perdido. No. No se trata de perder el recurso. Se trata de fortalecerlo y de hacer que florezca. Por eso, se va a tener un conjunto de monitoras, de acompañantes en este proceso, para garantizar que ese recurso se traduzca en proyectos con futuro.

Y el segundo eje, son justamente los Microcréditos y los apoyos que se den a negocios que ya estén formados.

Y entonces, éste es como el portal que, miren. Ayer que fui al Casa por Casa, nos tocó Xochimilco. Y fuimos a un pueblo originario que se llama Santa Cruz Acalpixca. Y caminando casa por casa, me encontré con varias mujeres que tenían sus negocios: unos adentro de su casa, otros un pequeño negocio, una estética, en fin; y todas pedían apoyo económico para créditos, para continuar con sus negocios.

Entonces, por supuesto que tenemos esta gran tarea.

Hay un convenio con FONDESO, para que se destinen, bueno, se tengan las atribuciones, para proceder a los créditos en este programa.

Y el tercer eje, que es uno de los más importantes, tiene que ver con el estímulo al empleo, a través de lo que María Elena llama Empresas Sororas, que muchas de ellas están aquí presentes.

Están dirigidas a mujeres que desean incorporarse a un mercado laboral, y no encuentran cómo. Y eso implica capacitación, formación, construcción, para que las mujeres puedan obtener empleo; empleo formal, empleo con dignidad, y ésta es una gran tarea.

Así que no sólo se trata de proyectos autogestivos, de generación de ingresos, sino también de conseguir empleo.

Como siempre lo hemos dicho: ningún programa social va a sustituir a un empleo. Si las mujeres tienen un buen empleo, son mujeres que van a salir adelante. Pero para que las mujeres tengan un empleo, tenemos que apoyarlas, para que esas barreras que lo impiden, puedan combatirse y salir adelante.

Una mujer no es que no busque un empleo, o que no tenga la capacidad para obtener un empleo, sino que tiene tres hijos, dos hijos, un hijo, que tiene que estar atendiendo; que tiene que llevarlo a la escuela, que tiene que regresarlo, que tiene que tener otros tiempos.

Así que bueno, yo sé que tenemos el respaldo de cámaras empresariales, como Canaco, Coparmex, Canacope, CMIC, Canadevi, AMMJE y el Consejo Coordinador Empresarial, que están generando plazas laborales, con enfoque de igualdad.

Entonces, confío en estas grandes coordinaciones, estas cámaras empresariales, para apoyar a las mujeres de la Ciudad de México.

Y bueno, yo quiero concluir, diciéndoles que tenemos entre 2025 y 26, 500 millones de pesos para este programa. Así que estarán destinados para la gestión de estos recursos.

Y a un lado, tenemos Sistema Público de Cuidados; tenemos Utopías para las mujeres, que son estos grandes espacios públicos transformados, a favor de las mujeres.

Y también una ciudad segura para las mujeres, con Territorios Libres de Violencia; calles iluminadas, transporte digno, y todo lo que tenemos que hacer, para que esta ciudad cada vez sea una ciudad libre de violencia hacia las mujeres.

Así que, reconocemos todo este esfuerzo que se está emprendiendo.

Enhorabuena con este gran programa, y felicidades a las mujeres que tendrán un gran apoyo en la Ciudad de México.

Y cuando decimos igualdad, debe de traducirse en programas concretos; si no, todo queda en discurso.

Así que felicidades a todas las mujeres, y vamos avanzando hacia ese gran objetivo, de derribar las barreras, las desigualdades que afectan a las mujeres.

Por último, quiero saludar a las visitantes argentinas. Un fuerte aplauso; un saludo por allá. Son diputadas nacionales y son representantes de gobierno; gracias por visitarnos.

Muchas gracias a todas.

COORDINADORA GENERAL DEL PROGRAMA DE AUTONOMÍA ECONÓMICA DE LAS MUJERES, MARÍA ELENA ESPARZA GUEVARA (MEEG): Buenos días a todas. Le damos la bienvenida a nuestra jefa de Gobierno, Clara Brugada.

Querida jefa de Gobierno, ésta es una muestra de lo que existe como iniciativa emprendedora en la Tiendita Feminista; así le llamamos a esta iniciativa que existe desde 2022, que hoy tiene más de 200 mujeres registradas, todas ellas con su creatividad van formando estos productos.

Aquí puedes ver, tenemos un poquito de todo: medicina tradicional, joyería, lo que nos ofrece Irma; tenemos trabajo con papel, hay mucho trabajo artesanal, mucho, mucho talento en esta Tiendita Feminista.

Los textiles, que siempre son un motivo de orgullo en nuestra cultura. Esta miel, que es deliciosa; de verdad, a todas les recomiendo que pasen al ratito, queremos que todas las compañeras de la tiendita se vayan sin productos, y con las manos llenas de ganancias.

Están las plantas de Juanita, un poquito de más de textiles, de creatividad. Los gatitos de la buena suerte, ¿no, Ada?

Gracias a todas por poner su espacio.

SECRETARIA DE LAS MUJERES DE LA CIUDAD DE MÉXICO, DAPTNHE CUEVAS ORTIZ (DCO): Compañeras, muy buenos días.

Qué alegría vernos reunidas hoy, de nueva cuenta, en este hermoso Museo de la Ciudad de México, que ha albergado varios de los eventos en favor de los derechos de las mujeres, que hemos realizado desde la llegada al gobierno de nuestra jefa Clara Brugada.

Muy buenos días, jefa.

Pues estamos aquí muy contentas, porque hoy presentamos un programa que no sólo fue compromiso de campaña, sino que ha sido motor de cómo entendemos los derechos de las mujeres.

Hoy nos acompañan estos pendones, con las pensadoras feministas que desde todos los tiempos, han esbozado una idea muy clara: las mujeres necesitan tener sus propios recursos, porque es así como pueden hacerse de sus derechos, de su autonomía, de su plan de vida, de su proyecto de futuro.

Y esa idea, que sólo fue una idea, se ha venido trabajando a lo largo de este primer año de gobierno.

Me siento muy orgullosa de que María Elena, esta compañera y aliada, sea quien desde la propia Secretaría de las Mujeres,estará al frente. Porque es nuestro eslabón seguro con las empresarias, con las aliadas, con quienes ya hemos venido construyendo un camino. Pero que hoy, ya con la certeza de un programa, vamos a alinear acciones.

También les digo que, si bien el programa se anuncia hoy, se ha construido con mucho entusiasmo a lo largo de todos estos meses, pero además ya tiene una manera de pilotaje; ya tiene mujeres que han estado cerca, que han recibido capacitación,y que a través de la secretaría han encontrado apoyo para comercializar sus productos.

Ellas, para quienes pido un aplauso, están hoy aquí vendiéndonos lo que ofrecen.

Estas compañeras son muestra de una colectividad que aglutina ya a 270 mujeres y que no solamente tienen un espacio de venta en la Secretaría de las Mujeres, sino a través de las alianzas con Cultura.

En otros de los edificios hemos logrado que vayan a ofrecer sus productos, y bueno, a veces con las propias diputadas, que también nos convocan a que llevemos a las compañeras; nos piden que vayan, y ahí ya organizamos su presencia.

Realmente es muy, no sé cómo decirlo, alegra el corazón saber que lo que ha sido un sueño y lo que ha sido una convicción política del movimiento feminista de mucho, de mucho tiempo, hoy pueda tener una oportunidad de ser política pública en el gobierno de Clara Brugada.

Eso sólo pasa porque nos gobierna una feminista, que además es economista y que además entiende que todas estas frases son el centro de una idea de cómo queremos a las mujeres.

Porque sí: nos queremos siempre vivas, nos queremos siempre libres, nos queremos siempre iguales, y nos queremos también poderosas y autónomas.

Muchas gracias.

COORDINADORA GENERAL DEL PROGRAMA DE AUTONOMÍA ECONÓMICA DE LAS MUJERES, MARÍA ELENA ESPARZA GUEVARA (MEEG): Buenos días, muchas gracias.

Saludo con mucho gusto a mis compañeras del presídium; a las empresarias, a las emprendedoras que hoy nos acompañan, a las compañeras de la Tiendita Feminista. También a los medios de comunicación, que nos van a ayudar a que muchas, muchísimas mujeres, se enteren de que existe este programa, que de inmediato procederé a presentar con el permiso de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, a quien le agradezco, de verdad, muy profundamente, la oportunidad de servir en algo que nuestra genealogía feminista ha señalado desde hace mucho.

Y aquí está. Ya lo decía la secretaria de las Mujeres. Ustedes pueden mirar esas frases y ver cómo de Kolontái a Adichie; cómo pasando por Colman o Nussbaum, está un mensaje clarísimo: la autonomía económica es libertad.

Así que si podemos por favor, empezar la presentación. El programa de autonomía económica que hoy les presentamos, tiene cuatro componentes.

Está la Activación, que consiste en localizar a las beneficiarias. Tenemos el tipo de estímulo que se puede recibir: hay tres, y de inmediato los presentaré a detalle.

Tenemos también el acompañamiento feminista, que es una idea de abrazar a las mujeres que sean parte de este programa, no solamente con guía financiera para ejercer los recursos, sino también con todo un cuerpo de conocimiento, que tiene que ver con la conciencia para el empoderamiento del ser.

Y todo eso, para conducir finalmente, al objetivo, que es el progreso económico. En otras palabras, igualdad y libertad, que es la lucha cotidiana por la que estamos aquí.

En la lógica de la localización de las beneficiarias, hay una necesidad de detectar a quienes tienen menos oportunidades, pero mayor necesidad de acercarse a este programa.

Para converger aquí una lógica, una dimensión territorial y transversal, que nos permitirá acercar el programa -porque sí, lo vamos a acercar; no vamos a esperar a que ellas lleguen a nuestras puertas-, vamos a tocar nosotras a las suyas. A las mujeres con mayores intersecciones de vulnerabilidad.

Estamos hablando en este caso, por ejemplo, de aquellas excluidas por el sistema bancarizado.

Ustedes saben que es muy difícil para las emprendedoras a veces llegar a pedir un crédito, porque entonces, el banco les pide el comprobante de ingresos, el recibo de nómina, el aval.

Están ellas, por supuesto, ahí destacadas. Están también las integrantes de las comunidades indígenas; aquellas en vía pública o en la informalidad. Las madres solteras, las mujeres jóvenes. También las mujeres de 50 años y más.

He encontrado muchas en recorrido, que me dicen: ya nadie me contrata, ya nadie me presta. Nosotras sí voltearemos a mirarlas.

También las mujeres de la diversidad sexual. Y también me importa mucho nombrar a las mujeres con discapacidad. También para ellas es este programa, porque a veces puede parecer, es un mito que hay que destruir, que la discapacidad impide las autonomías.

Saldremos a buscarlas y lo haremos al integrarnos a programas que ya han demostrado un altísimo impacto en este gobierno, que da preponderancia a lo territorial, con el ejemplo de nuestra jefa de Gobierno. Por ejemplo, el Casa por Casa, o el Zócalo de Gobierno Ciudadano.

También, por supuesto, puede existir la propia iniciativa de las mujeres, hoy que muchas se van a enterar. Estoy segura de que muchas van a llegar a solicitar el apoyo y estaremos de puertas abiertas esperando esas solicitudes. Y siempre, siempre, nombramos a las mujeres víctimas de violencia de género. Por favor, la siguiente.

Hay tres tipos de estímulo.

El primero es el Capital Semilla, al cual se puede aplicar solamente una vez. Es un apoyo de 25 mil pesos; no son reembolsables, se entregan a través de FONDESO, con quien estamos trabajando muy de cerca.

¿Y quiénes pueden recibirlo? Lo hemos dividido en dos grupos. Ahí ustedes lo pueden ver en la pantalla: al primero lo llamamos Siempre Vivas y Emprendedoras. Son las mujeres que no han podido romper el ciclo de violencia, porque dependen económicamente de su agresor.

Sabemos que el mayor riesgo para las mujeres, está en el espacio doméstico; está en el espacio privado. Y ésta es la respuesta que damos, para que puedan salirse de ahí, a través de la generación de sus propios ingresos.

Y el segundo grupo son las mujeres en primeros pasos de negocios; aquellas que tienen una idea verificable, una idea viable, pero que nadie les ha dado un voto de confianza, hasta ahora.

Nosotras, en el gobierno de Clara Brugada, y desde la Secretaría que encabeza Daptnhee Cuevas, con quienes es un honor trabajar, lo haremos. Sí, lo haremos. La siguiente, por favor.

El segundo tipo de estímulos son los Microcréditos. A estos, pueden aplicar las mujeres que tienen una nano, micro, pequeña empresa, que a través de la formalización y de este estímulo, pueden aumentar su rentabilidad.

Vamos a lograr que esa idea que han sembrado con tantas ganas, con tanta ilusión, sí sea cosechada como un negocio exitoso, por eso le pusimos Cosecha de Negocios.

Ustedes pueden ver ahí en la pantalla los montos: van de 10 mil a 100 mil pesos. También se entregan a través de FONDESO. Y es muy importante decir que tienen tasas anuales inexistentes. Vean, que hay algunos de cero por ciento, o de 3 por ciento, que es realmente muy baja, respecto a lo que existe en el mercado bancario.

Otro estímulo importante que está conectado con esto, es el pronto pago y el pago cumplido. Sabemos que las mujeres somos las más cumplidas con nuestras deudas, las más responsables; así que ésta es una forma de desarrollar y apoyar financieramente, de forma sostenida y sostenible, los emprendimientos de las mujeres. La siguiente, por favor.

Éste es el tercero, se llama Empresas Sororas. Le pusimos así porque son empresas que han decidido sumarse, abrir plazas, con todos los derechos, con todas las prestaciones, a las mujeres que por razones familiares, por labores de cuidado. Y aquí es muy importante la interacción de este programa de Autonomía Económica, con el Sistema Público de Cuidados, que ha implementado la jefa de Gobierno, Clara Brugada, en esta ciudad. Y que es tan bueno y con tanta referencia a nivel internacional, que se ha ganado premios en todo el mundo.

Rocío Lombera acaba de ir a recibir uno. De hecho, allá por África, en la ONU, en todos lados, han reconocido este trabajo del Sistema Público de Cuidados.

Y también aquellas que simplemente por pobreza de oportunidades, no han podido conectar con lo que consideramos, es el mejor programa social, que es un empleo.

Muchas de las Empresas Sororas están hoy aquí. Yo les agradezco muchísimo, y más, muchas más, esperamos que hoy que se enteren de que esto existe, y se sumen a apoyarnos.

Aquí agradezco el respaldo de quienes nos acompañan. También representadas acá, la Canaco, Coparmex, Canacope, CMIC, Canadevi, AMMJE, G100; la Cámara Británica de Comercio y el Consejo Coordinador Empresarial.

Todas están aquí, y estoy segura de que vamos a ser un gran equipo, Isabel, Ada, Elena, Pati, Carmen, Leti, de verdad, muchas gracias, muchas gracias, por unirse. La siguiente, por favor.

Lo que vemos aquí es la parte del programa que arropa cualquiera de los tres componentes. Todas las mujeres que son parte de la red de autonomía económica, tendrán el acompañamiento de 70 monitoras en territorio, que les ofrecerán no sólo guía para el ejercicio financiero de los recursos, sino también capacitaciones y talleres, sobre alfabetización en derechos, y conciencia para el empoderamiento.

Nos importa mucho también, sentar un modelo de referencia, en términos de formación en sectores no feminizados, que son estratégicos y que tienen alta demanda actualmente.

Esto lo haremos en alianza con SEDECO. Aquí está Manola, le agradezco mucho, mucho, que desde el día uno, se sumó al proyecto. También con la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo, cuya titular está compareciendo ahora ante el Congreso.

Estamos hablando, ¿de qué formación? Por ejemplo, en ciencia, en tecnología, en matemáticas, en ingeniería, en inteligencia artificial. Y les adelanto algo: estamos preparando, con tecnología de Google y de Outlook AI -aquí está Zaira, gracias por eso, Zai-, un asistente virtual que estará disponible 24/7 para nuestras emprendedoras afiliadas a este programa.

En este momento, quiero también expresar mi gratitud con Rocío Lombera, por su sororidad en la creación de este programa. Mucho de lo que ven, lo hicimos juntas. Gracias, Rocío, de verdad. La siguiente y la última.

El objetivo es el progreso económico. Lo sabemos por la experiencia internacional. Hay cosas de éxito muy documentadas, por ejemplo, por la CEPAL, que nos lo demuestra.

Sí, el acceso al crédito y al empleo son importantes, de hecho, es fundamental, pero también es insuficiente. Las mujeres necesitan, necesitamos y merecemos más.

Por ejemplo, saberse poseedoras, sí, de un patrimonio, pero también de una autoestima saludable; de salud física y mental, de desarrollo cultural.

Y por eso celebro mucho que también aquí nos acompañan Ana Francis, Nadine, Nelly, porque todo esto es un programa que recorrerá transversalmente al Gobierno de la Ciudad de México, una ciudad muy feminista.

Una mujer autónoma no sólo se transforma a sí misma y a su entorno inmediato, sino que construye una ciudad más justa, solidaria y sostenible.

Se trata en última instancia, de darles a las mujeres un lugar como generadoras de riqueza, de bienestar y de humanismo.

Una de las frases que están aquí colgadas, y allá la pueden ver, es de Clara Brugada, de nuestra jefa de Gobierno, y ése va a ser también el mantra del programa de Autonomía Económica de las Mujeres. Dice: Ninguna mujer podrá ser libre, si no tiene autonomía económica.

Con eso nos vamos a guiar en este programa, que nace con alma feminista, con mirada sorora y con cuerpo territorial.

Porque sí, como decía Daptnhe, en la Ciudad de México nos queremos siempre vivas, siempre iguales y siempre libres.

Muchas gracias.

PRESIDENTA DE LA ASOCIACIÓN MEXICANA DE MUJERES, JEFAS DE EMPRESA, ISABEL ORTIZ ROJAS (IOR): Con el permiso de las personalidades que integran el presídium; señoras y señores, muy buenos días.

Agradezco la amable invitación de permitirme representar a la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa, AMMJE Ciudad de México, en este importante evento de presentación del programa de Autonomía Económica de las Mujeres. Gracias, doctora María Elena Esparza, por esta confianza y reconocimiento.

Me sumo con entusiasmo, para dar la bienvenida a celebrar y respaldar, la creación de este programa, el cual podemos vislumbrar como una iniciativa que no sólo es necesaria, sino que tiene un potencial inmenso, para transformar vidas y fortalecer a nuestra capital.

Y por este hecho, hoy es un día verdaderamente inspirador, que nos mueve a quienes nos encontramos reunidos el día de hoy, a reafirmar nuestro compromiso con el progreso y la equidad.

La Ciudad de México es sin duda, el motor económico de nuestro país; es un epicentro de innovación, de talento, de oportunidades. Y en el corazón de esta vibrante economía, encontramos a mujeres emprendedoras, empresarias, líderes y trabajadoras incansables.

Una fuerza vital, que impulsa el crecimiento, genera empleo y enriquece nuestro tejido social.

El emprendimiento por cuenta propia suele ser muy volátil, y a veces funciona como una válvula de seguridad del mercado laboral.

Cuando no hay empleos formales, la gente se vuelve emprendedora por necesidad; sin embargo, el segmento de empleadoras, es un indicador muy sólido en el ecosistema empresarial dinámico.

La participación en el emprendimiento femenino, es cada vez mayor, creando negocios que no sólo buscan el éxito financiero, sino que también suelen ser de un impacto social positivo. Sin embargo, aún enfrentamos desafíos, para que todas las mujeres puedan alcanzar su máximo potencial económico y tener las mismas oportunidades que sus pares.

Es precisamente aquí, donde programas como éste, vuelven cruciales la autonomía económica de las mujeres. No es sólo un tema de justicia social. Es una estrategia inteligente y creativa para el desarrollo.

Cuando las mujeres tienen acceso a recursos, capacitaciones y redes de apoyo, como AMMJE, no sólo mejoran sus propias vidas y las de sus familias, sino que también contribuyen de manera más sólida y sostenida, a la economía local. Y por ende, a la de todo el país.

Está comprobado que los microcréditos tienen un impacto significativo en las mujeres emprendedoras, ya que ocupan ese dinero para invertir en sus negocios, no para cubrir sus necesidades.

Sabemos que si ponemos a trabajar este dinero, vamos a generar más. Sin embargo, el éxito en este tipo de acciones, depende de la combinación de acceso a créditos, capacitación financiera, de marketing, de calidad en el servicio al cliente, etcétera.

En ese sentido, la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresa, AMMJE Ciudad de México, que me honro presidir en este año, es un organismo aliado, comprometido y siempre dispuesto a colaborar con el gobierno de la Ciudad de México y con todas las instituciones y personas que comparten nuestra visión y nuestras acciones, en favor del empoderamiento femenino.

Creemos firmemente, en que cada acción que impulsa la autonomía económica de una mujer, se traduce a mediano plazo en un beneficio tangible, duradero, y para la sociedad en general.

Estamos conscientes de que las mujeres emprendedoras requerimos acceder a herramientas operativas, digitales, de comunicación, etcétera, para ser competitivas en el mundo de los negocios.

Y por ello, celebro que desde la gestión de nuestra jefa de Gobierno, Clara Marina Brugada Molina, se lance este programa, que significa esperanza y un camino abierto hacia un futuro, donde cada mujer en nuestra capital, pueda desarrollar su máximo potencial, sin barreras y con el apoyo necesario para prosperar.

Gracias también a los servicios integrales de FONDESO. La AMMJE celebra esta iniciativa y nos comprometemos a trabajar con ustedes, para asegurar su éxito y su impacto transformador, que inicia con el impulso de las mujeres, y en consecuencia, con el impulso de las familias más fuertes, comunidades más prósperas, y una Ciudad de México aun más justa y equitativa.

Con orgullo les comparto, que desde nuestra plataforma haremos difusión permanente a toda la oferta que nuestra ciudad ofrece.

No tenemos duda de que con el trabajo de gobierno, organismos empresariales y academia, seguiremos posicionando a la capital de nuestro querido país.

Muchas gracias.

PRESIDENTA DE LA CÁMARA NACIONAL DE COMERCIO EN PEQUEÑO (CANACOPE), ADA IRMA CRUZ DAVALILLO (AICD): Bueno, pues ante todo, muchísimas gracias por esta enorme oportunidad.

Mi queridísima jefa de Gobierno, con todo mi corazón, mi agradecimiento por todo lo que haces por este sector. Manola, muchas gracias por todo; María Elena, esta oportunidad es única.

En esta ocasión, quiero vivir este gran momento con todos ustedes; pero les quiero compartir lo que hoy significa para mí, este sitio, esta oportunidad.

No sólo, como presidenta de CANACOPE Ciudad de México, sino como mujer de negocios, que ha caminado las mismas calles y enfrentado los mismos desafíos de cada una, del 59.8 por ciento de mujeres que enfrentan y participan en el comercio formal.

Sabemos que el camino no ha sido fácil para ninguna de nosotras. Todas y cada una de nosotras, sabemos lo que ha significado llegar hasta aquí.

Sabemos que este camino lo hemos tenido que recorrer a veces, como dicen, con dolor, lágrimas y sangre.

Este porcentaje del 59.8 mujeres, no es solamente una cifra estadística. Veo el rostro de cada una de las mujeres que salen en el grupo de las 4:00 de la mañana o de las 5:00, ya de las 5:00, sino a las 4:00 de la mañana, de este club, que están con el ojo despierto, pensando en qué va a pasar este día que está comenzando.

Veo el rostro de la señora que abre su fonda cada mañana en la colonia Doctores. El esfuerzo de la joven que tiene un smartphone en la colonia Nápoles. Veo a nuestras queridas artesanas, que todos los días se esfuerzan en hacer su trabajo.

Nereida, muchas gracias por este trabajo que realizas. Esto es importante para nosotras.

Veo en todas ustedes, el corazón latiente de mujeres, que pese a todo lo que han sufrido, están dispuestas a salir adelante, para enviar a sus hijas y a sus hijos a la escuela, a la universidad, a tener una familia unida y digna.

Con todo esto, están dispuestas a salir adelante. Sabemos que este corazón latiente de mujeres tiene muchas necesidades. Y sabemos que este corazón latiente de mujeres, están esperanzadas a recibir algo de lo que ustedes, de lo mucho que ustedes han dado.

La Ciudad de México, entre el 2020 y el 2025, según los datos del INEGI, la población ocupada fue del 37.2 por ciento; lo cual significó un millón 339 mil 781 empleos, de los cuales, 711 mil 202 nuevos empleos, fueron de mujeres.

Estos empleos, desde luego, corresponden a esas nuevas creaciones en que las mujeres innovaron; tuvieron la oportunidad de estar en estos sitios.

Pero nosotros sabemos que, sin embargo, a pesar de haberse creado tantos empleos y tener la oportunidad de abrir negocios, no todos los negocios prosperan.

Sabemos que los empleos muchas veces no son equitativos, en cuanto al sueldo que se recibe, entre la población varonil y las mujeres, que hay mucha diferencia.

Y por eso estamos luchando: porque el desarrollo humano, como lo dice allí, incluye la libertad económica de las mujeres y nosotros, esa libertad, la necesitamos desde la creación del empleo.

No solamente en la familia se busca esa libertad económica, sino las iniciativas que como mujeres tenemos y que deben de ser valoradas en cualquiera de los aspectos.

Tenemos esa oportunidad y ese deber, de valorarnos a nosotras mismas. De darnos la oportunidad de creer que lo que nosotros pensamos, lo que nosotros hacemos, tiene mucho valor y debemos de exigirlo, como lo que es.

Esas iniciativas que deben de aterrizar en algo productivo, para que tenga la libertad económica que se merece cada una de nosotras.

Cuando estos esfuerzos se unen entre el gobierno, las empresas y la academia, las probabilidades de éxito son muy grandes.

Una mujer preparada, una mujer que tiene el deseo de capacitarse, es una mujer que ya tiene un punto a su favor. Es una mujer que quiere salir adelante, y que tiene mayores oportunidades que quienes no lo están haciendo.

Hay muchos desafíos, y cuando estas fuerzas se unen, hay mucho potencial para poder hacerlo. Hay retos y desafíos. Cuando tú abres un negocio, lo abres con la esperanza de que ese esfuerzo que tú estás poniendo ahí, tenga frutos, rinda, te sea redituable.

Quienes solamente están esperando recibir dinero con la mano extendida, nunca van a poder tener éxito en su negocio, porque el negocio necesita esfuerzo, necesita disciplina, necesita capacitación y necesita que reditúe económicamente.

Porque quien tan sólo recibe una parte de ese dinero para abrir el negocio y no hace nada más, está destinado al fracaso. ¿Y saben qué les digo?

Las mujeres no estamos destinadas a fracasar. Las mujeres somos las primeras emprendedoras, las primeras administradoras; somos las primeras en poder hacer de nuestro propio hogar, el primero de los negocios. Díganme si no.

Somos las administradoras naturales de ese gasto que nos llega a la casa; la que lo estiramos, la que le damos al marido para los transportes, las que le damos a los chicos para el lunch. Pero aparte de eso, tenemos que hacer que esa economía doméstica, alcance. ¿Y saben qué?

Y como siempre nos ha dicho la jefa de Gobierno: ése es un trabajo que no reditúa, pero que sin embargo, deja mucha satisfacción.

Por eso, uno de los programas que tiene la jefa de Gobierno, y a mí me encanta, porque está buscando que se haya una retribución a la gente que cuida, que cuida tu hogar, que cuida tu casa, que cuida tu papá, a tu mamá, a tus hijos. Esos retos también los tenemos que enfrentar.

La informalidad también es otro reto, porque quienes se arriesgan a poner toda su capacidad en la informalidad, están también negándose el derecho a tener esa atención que se merecen; esos servicios sociales, ese servicio de salud, esos servicios que, si fueran formales, podrían obtener.

Incluidas también las mujeres jóvenes. Aquí tenemos a nuestra madre e hija, que están emprendiendo su negocio, y que la madre está, en un momento dado, dando la oportunidad a su hija; porque incluir a las mujeres jóvenes en el emprendimiento, en la educación, en el mercado laboral, es impulsar el desarrollo personal, familiar y de nuestra propia ciudad.

Aquí hay muchas mujeres que han sido ejemplo de inspiración; que han roto el techo de cristal. Nuestra jefa de Gobierno es una inspiración, porque ha roto ese techo de gobierno, en las que todos nos estamos inspirando. María Elena, todas las que estamos aquí; Manola, nuestra joven secretaria.

Mujeres jóvenes que han roto ese techo de cristal, y que son ejemplo para muchas. Las invito a que todas sigamos siendo inspiración, para las demás mujeres.

A los medios de comunicación los invito a que ustedes sean difusores de lo que están viviendo aquí, de lo que están viendo, para que ninguna mujer se quede sin esta oportunidad, para poder seguir adelante. Esta invitación tenemos que aprovecharla a todas.

Y una cosa les digo: ni un paso atrás, ni para tomar impulso.

Gracias.

Texto y Fotografías: Gobierno de la Ciudad de México