Ciudad de México, 3 de diciembre de 2025

Alberto de Santiago Murillo, presidente de Agricultores de Áreas Agrícolas y Pecuarias de Zacatecas, señaló que, aunque hubo modificaciones al proyecto original del dictamen de la Ley General de Aguas, continúan aspectos que consideran injustos para el campo.

En declaraciones a representantes de medios de comunicación, De Santiago Murillo afirmó que el dictamen inicial de la ley “nos criminalizaba y nos agredía”, por lo que exigió que se integren las propuestas presentadas por los productores. “La ley es justa, debe ser justa y es necesaria”, pero insistió en que aún existen puntos que deben revisarse antes de su votación en el Pleno.

“Lo que requerimos es tiempo y responsabilidad de todos, del Poder Legislativo, nosotros como productores, y que nos den la oportunidad de hacer propuestas viables, que están sustentadas con base en la necesidad que tenemos, porque ahorita, como querían aplicar la ley, nos criminalizaba y nos agredía”, expresó.

El representante aclaró que los productores no pertenecen a ningún grupo o partido político y aseguró que su presencia fuera del Congreso no representa una amenaza, sino un llamado al diálogo: “No es advertencia, porque no venimos a pelear, venimos a construir”.

Entre las principales demandas está que la legislación sea estricta con quienes contaminan el agua, particularmente industrias como la cervecera, minera, refresquera y textil. “Ahí es donde debemos incidir, porque todas las empresas transnacionales, si explotaran el recurso agua en sus naciones, no lo permitirían.

“Necesitamos planear, organizar, que la ley y la justicia se aplique en un proyecto integral, donde todo el proceso productivo del campo sea protegido. Si protegemos al productor, damos paz y seguridad social a todas las familias de los productores y de todos aquellos jornaleros que contribuyan a través del trabajo a una actividad digna, que es el de producir alimentos”, puntualizó.

Por otro lado, De Santiago Murillo también pidió regular los precios de productos agrícolas para garantizar ingresos justos, por ejemplo, dijo, en el caso del frijol en Zacatecas la buena voluntad hizo que el precio de garantía fuera de 27 pesos, sin embargo, consideró que se requiere una regulación adecuada que permitiría que los comercializadores cumplieran su función sin necesidad de subsidios gubernamentales.

“En este caso, si se forma una ley que obliga a quien comercializa, que también tiene derecho a vivir, pues que comercialice, porque ellos tienen el recurso, tienen las bodegas, tienen la maquinaria y tienen el equipo para hacer las cosas bien”, dijo.

Insistió en que el campo requiere estabilidad para avanzar. “Lo que queremos es que la ley abra los caminos, que despeje los caminos para poder trabajar en paz”.

De Santiago Murillo subrayó la importancia del sector primario para la economía y la vida cotidiana del país.

“La columna vertebral del mundo somos los productores. Estamos presentes en todos los hogares, en el almuerzo, en la comida y en la cena”.

Hizo un llamado al Poder Legislativo a actuar con responsabilidad y visión de futuro. “Necesitamos ser visionarios y futuristas porque las nuevas generaciones se merecen un futuro digno”.

Texto, Fotografía y Video: Cámara de Diputados